El frenesí de las compras -regalos, adornos, árboles de Navidad- es algo que se ha convertido en un elemento casi obligatorio del periodo prenavideño. Hoy en día, la Navidad es una fiesta muy comercializada, lo que se traduce, entre otras cosas, en una mayor producción de residuos.
Esto contribuye a agravar el cambio climático negativo. El nivel del agua sube, las temperaturas son más altas, las especies se extinguen y el ecosistema se hunde.
Los científicos llevan mucho tiempo buscando una respuesta a la pregunta: ¿cuál es el mejor remedio? ¿Qué medidas preventivas hay que tomar?
Residuos - ¿Dónde y cómo?
Podemos distinguir 8 tipos de residuos:
- sobreproducción, producción excesiva,
- exceso de inventario,
- errores y defectos de calidad,
- pausas en la producción, proceso de espera,
- el procesamiento excesivo,
- transporte innecesario,
- movimiento innecesario,
- el potencial no utilizado de los empleados.
Los residuos se producen en prácticamente todas las partes de la cadena de suministro: en la producción, el almacenamiento, la logística, las ventas y también en los consumidores. ¿Hay alguna forma de solucionarlo?
La solución puede ser la ecología
La ecologística también se denomina logística verde (ang. Greenlogistics), pero puede encontrarse con el término logística inversa. Se puede definir de muchas maneras. En cierto modo, como su nombre indica, es una subárea de la logística centrada en la ecología. Abarca todas las actividades de la empresa relacionadas con la recogida, el flujo, el reciclaje y la eliminación de residuos de la forma menos perjudicial para el medio ambiente.
La ecología no es sólo los procesos que tienen lugar en las empresas, sino también las actividades a una escala mucho mayor. Es tanto la gestión de los residuos que ya se han creado, pero también medidas preventivas. El alcance de estas actividades también incluye: educar al público sobre la ecología y la gestión adecuada, organizar la recogida de residuos no estándar o la eliminación especial de materiales peligrosos.
¿Qué pasa con este clima?
Al principio, la ecología sólo se ocupaba de la investigación, pero con la creciente concienciación del público, también empezó a aportar soluciones en el campo de la optimización de los residuos.
Los informes sobre el estado del medio ambiente, elaborados por organizaciones especializadas, no dejan lugar a dudas: estamos ante una crisis medioambiental. El Informe "Estado del clima mundial 2020". elaborado por la OMM muestra que hay algo que temer. El nivel del mar está subiendo, las temperaturas están aumentando y los niveles de dióxido de carbono están aumentando de forma espectacular. Hay muchas razones, y una de ellas es el constante aumento de la producción de residuos innecesarios.
Gestión consciente
La ecología es la primera acción, pero la prevención es igualmente importante, es decir, evitar las cantidades excesivas de residuos.
La Navidad es el momento perfecto para pensar en ello. Los consumidores compran bienes que a menudo se desperdician. Esto se aplica tanto a los alimentos como, por ejemplo, a los regalos perdidos.
Según el Informe de la Federación de Bancos de Alimentos de PoloniaEn 2020, tantos como 53.75% de los polacos admiten que tiran comida, la mayoría de las cuales se refieren a tirar comidas preparadas y no utilizadas. El aumento del consumo también conlleva un incremento de la generación de residuos (por ejemplo, los envases de los regalos).
Gracias a la educación y a las campañas sociales en las que participan cada vez más empresas, aumenta la concienciación de la sociedad, la voluntad de ampliar los conocimientos y de poner en marcha actividades adecuadas en el ámbito de la ecología. Pero la pregunta es: ¿qué pueden hacer las empresas para reducir la cantidad de pérdidas y residuos en la cadena de suministro?
Parámetros adecuados
Al principio, sería aconsejable centrarse en las causas de esa gran cantidad de residuos innecesarios en la fase de producción, almacenamiento, entrega y venta.
La solución puede ser muy sencilla: un control de los productos que cubra tanto la temperatura como la humedad en cada fase de la producción y el almacenamiento.
Gracias a ello, los empresarios estarán seguros de que la mercancía se mantiene en condiciones adecuadas, y el sistema les notificará inmediatamente un cambio significativo en los parámetros mediante alertas en la aplicación.
Esto da a las empresas la oportunidad de perseguir dos objetivos en el campo de la ecología al mismo tiempo: el económico y el ecológico. Todo se reduce a reducir los costes asociados al producto y a su producción, mientras que esta última contribuye a la protección del medio ambiente. - añade Daria Roszczyk-Krowicka.
¿Qué le depara el futuro a Polonia?
Polonia está en el buen camino hacia una gestión de la producción ecológicamente madura. Las tendencias cambian constantemente, pero en este momento uno de los pasos más importantes para los empresarios es la implantación de soluciones que aporten beneficios en el futuro en forma de ahorro, mejor imagen, optimización de la cadena de suministro y, sobre todo, reducción de residuos innecesarios.